Encina (Quercus rotundifolia)

 

Etnobotánica.

La pelosidad, el borde de la hoja, su forma y la calidad de su corteza caracterizan cada especie de “quercínea”. En Villanueva la carrasca es un árbol que alcanza 15-20 m de altura, con el tronco corto, derecho o algo torcido, y la corteza resquebrajada de color gris oscuro casi negro. Las hojas son brillantes por la cara superior, de forma lanceolada y borde provisto de un número variable de dientes, cubiertas de pelos blanquecino o grisáceo en su cara inferior. Las flores masculinas se agrupan el extremo de las ramitas. El fruto de este árbol, es una bellota ovoide.

 

Tradicionalmente se han empleado las cortezas, hojas y brotes en decocto como antidiarreico vía interna y sobre la piel cicatrizante y antinflamatorio.

 

Las bellotas se han empleado para alimento del ganado.

 

De forma simbiótica en sus raíces crecen hongos de la especie tuber, muy apreciados en el mercado gastronómico.

Partes usadas y función principal:

  • Corteza: tradicionalmente astringente y antiinflamatoria
  • Bellotas: comestibles tras tratamiento, de uso antidiarreico en medicina popular

Fitocompuestos responsables:

  • Taninos (gálico, elágico): responsables del efecto astringente, antidiarreico y cicatrizante
  • Flavonoides: efecto antioxidante y antiinflamatorio leve
  • Almidón y azúcares (en bellotas): valor nutricional
  • Trazas de saponinas: contribuyen a efectos gastrointestinales leves

Usos tradicionales:

  • Gastrointestinal → [Bellotas (2)]: utilizadas tostadas o cocidas como antidiarreico rural
  • Boca / Garganta → [Corteza (2)]: decocción para enjuagues y gárgaras
  • Dolor / Inflamación y Piel / Heridas → [Corteza (2)]: lavados, cataplasmas o baños sobre zonas afectadas

Modo de uso:

  • Decocción de corteza: 10–15 min, para uso interno (diarreas) o externo (inflamación y úlceras)
  • Bellotas tratadas: hervidas o remojadas para eliminar taninos; luego consumidas